martes, 31 de mayo de 2011

sábado, 21 de mayo de 2011

LA FAMILIA


La familia siempre ha sido y es, el principal pilar de la sociedad. Es el lugar donde los miembros nacen, aprenden, se educan y desarrollan. Debe ser refugio, orgullo y alegría de todos sus miembros. Cuando la familia tiene problemas, alegrías o tristezas internas, repercuten en todos los familiares, sufriéndolos o disfrutándolos, debido a su total interrelación. Todas las legislaciones del mundo, tienen que tener leyes, que protejan el concepto de la familiar y facilitar lo más posible su unión y continuidad. La familia se convierte en un castillo, que además de servir de refugio de sus componentes, estos tienen que defenderla a ultranza, de todos los ataques que le hagan. No pueden permitir que lo dañino pase sus puertas. Todos tienen que formar un solo cuerpo, para defender su propia vida presente y futura.
Tener una buena familia, es un privilegio que no tiene precio. Sentirla como refugio en las angustias, peligros o incertidumbres y percibirla como receptora, para compartir las alegrías y logros alcanzados!

EL PROYECTO DE VIDA




El proyecto es como un camino para alcanzar la meta: es el plan que una persona se traza a fin de conseguir un objetivo. El proyecto da coherencia a la vida de una persona en sus diversas facetas y marca un determinado estilo, en el obrar, en las relaciones, en el modo de ver la vida.

El proyecto de vida es la dirección que el hombre se marca en su vida, a partir del conjunto de valores que ha integrado y jerarquizado vivencialmente, a la luz de la cual se compromete en las múltiples situaciones de su existencia, sobre todo en aquellas en que decide su futuro, como son el estado de vida y la profesión.

La dificultad mayor para trazar el proyecto de vida reside en tener que tomar una decisión, en tener que elegir una dirección fundamental con exclusión de otra u otras direcciones fundamentales. Frecuentemente ante este compromiso se adopta una actitud de huida que conduce a la persona a un estado de indecisión, es decir, hacia un "conflicto existencial" que, al no ser resuelto, se convierte en crónico.

El miedo a la responsabilidad, la incapacidad de renunciar a alguna de las posibilidades presentadas, la influencia del ambiente social contrario a los compromisos definitivos son frecuentemente las causas de este conflicto no resuelto.

Tener un proyecto de vida es fundamental. De lo contrario se vive sin rumbo, a la deriva; se vive sin sentido. Este es el drama en el que vive hoy mucha gente.

Por ello, es importante que elabores tu propio proyecto de vida. Hoy te invitamos a que lo hagas. Te invitamos a que te des cuenta de lo importante que es, a que te des cuenta de que lo necesitas, de que es vital.

Pasos:
Necesitas de unos objetivos (que son las bases para construir tu proyecto y presentar las circunstancias que tiene para lograr ese sueño).
También es muy importante tener un punto de partida que este sujeto a la realidad que tú presentas y las condiciones y posibilidades para lograr el sueño.
Lo primero que hay que hacer en un proyecto de vida es plasmar las cualidades y lo que debe mejorar y lo que se va a proponer para lograr
Después plasmar la autobiografía de cómo han surgido esas metas a lo largo de la vida y cuáles han sido la personas de apoyo.
Luego se muestran los aspectos generales de tu conducta (religiosa, intelectual, Tener autoconciencia que permita conocer de mi mismo el respeto a la vida, la autoestima y mí autonomía.
Y al final solo confía en que lo vas a lograr, y tener positivismo.
Después describa quién es en este mundo, por qué existe, cuál es tu misión en este mundo, como puedes realizar lo que te propones, como puedes hacérselo saber a los demás, como puedes derrotar y superar todas las barreras hacia tus sueños.
Y al final decir tu propósito y todas las alternativas que tiene para poder cumplirlo.
Tener siempre la confianza muy alta si se fracasa para poder levantarse.

Consejos:Es importante tener claro la meta que tengas a realizar y que estés enfocado en la realidad que te rodee y que esa meta se pueda realizar
Siempre piensa en las personas que te apoyan, tu eres el dueño(a) de tu sueños y no vas a dejar que nadie te las derrumbe.
Y lo más importante es tener optimismo y ganas de sacar tus metas adelante.
Nunca te rindas y no hagas caso a lo que las demás personas te digan ni te hagan solo toma en cuenta tus pensamientos y los consejos positivos de los demás.
Otra de las grandes cosas que hay que hacer para un proyecto de vida es hablar con sinceridad.



¿En realidad quieres ser médico?

REFLEXIONES SOBRE LA PROFESIÓN DE MÉDICO


El valor de un hombre debe ser medido
Por lo que da, no por lo que obtiene.
EINSTEIN

M.C. LIGIA GARCÍA CÁCERES.
Subdirector Académico.
Facultad de Medicina. UAEM

Es conveniente meditar lo que significa ser médico, y formar parte de esta profesión, reflexionar si el hecho de ser médico nos significa llevar una vida honorable, que nos dignifique como personas.

El ejercicio de la medicina se ve cada día más expuesto a desviaciones de su concepción original, en donde el respeto, la prudencia y el secreto profesional constituyen entre otras, características esenciales en la práctica de nuestra profesión médica.

Es fácil olvidar los principios fundamentales que deben ser el paradigma en nuestro actuar.
No se puede concebir que un médico sea solamente técnico, mero aplicador del
conocimiento, requiere de un profundo sentido del humanismo y, sobre todo, de gran capacidad de decisión frente a las distintas situaciones que se van presentando. Es imperativo ser profesionales responsables, íntegros, con sólida formación científica y técnica, así como tener un irrenunciable compromiso con la vocación de servir, y con el objetivo de tratar de lograr la salud y el bienestar de nuestros pacientes y de la comunidad.

Nuestro país necesita más médicos científicos que, además de saber curar “una
enfermedad”, sepan que es mejor curar a la persona enferma; que sean conscientes del valor de la vida humana, que la amen, la respeten y estén dispuestos a dedicar todos sus esfuerzos al servicio de sus semejantes, como único y verdadero sentido de su vocación de médicos.

La actividad médica debe estar siempre en concordancia con aquello que le da origen: la solicitud de ayuda expresada por quien se considera necesitado por encontrarse con un problema de salud. Es decir, es la respuesta a una petición de ayuda de parte del enfermo.

La parte sustancial de la medicina como profesión es que su trabajo lo realiza con seres humanos. Quiero plantear aquí la necesidad de reflexión, y preguntarnos si existe indiferencia ante las necesidades emocionales de los pacientes, si somos protagonistas del proceso de despersonalización, indiferencia o frialdad humana, o actores de la marginación social y conversión del paciente en un objeto, prescindiendo con ello de sus sentimientos y valores.

Vivimos en un mundo marcado por la deshumanización en todos los ámbitos, y la
medicina no ha escapado a esta tendencia; se le está dando más importancia a los medios técnicos, con la consecuencia obligada de la pérdida esencial: descubrir cómo es el enfermo, entablar una relación personal con él, reconocer y promover que la persona humana es el centro de toda nuestra atención. Es necesario enfatizar que el fin último de nuestro trabajo, es devolver al paciente la salud, la paz, la armonía, el equilibrio con las personas y las cosas que lo rodena. La relación médico paciente es uno de los puntos clave del ejercicio de la medicina.

Todo médico debe tener como objetivo primordial el dar al enfermo la mejor atención que los recursos y circunstancias pueden ofrecer para ello.

El médico, para tomar decisiones, no debe ignorar el sentir propio del paciente, el de sus familiares, y el de la sociedad a la que pertenece. Nuestra profesión tiene un componente humanista fundamental que, de no cumplirse, deja de ser medicina humana, para convertirse en veterinaria de alto nivel. La medicina tiene un componente de responsabilidad fundamental; los médicos, en el ejercicio profesional, caminamos múltiples senderos para encontrar nuevas soluciones, y de esta manera, ayudar a nuestros semejantes.

Todo médico debe tener como objetivo primordial el dar al enfermo la mejor atención que los recursos y circunstancias pueden ofrecer para ello.

El médico, para tomar decisiones, no debe ignorar el sentir propio del paciente, el de sus familiares, y el de la sociedad a la que pertenece. Nuestra profesión tiene un componente humanista fundamental que, de no cumplirse, deja de ser medicina humana, para convertirse en veterinaria de alto nivel. La medicina tiene un componente de responsabilidad fundamental; los médicos, en el ejercicio profesional, caminamos múltiples senderos para encontrar nuevas soluciones, y de esta manera, ayudar a nuestros semejantes.

Las tareas del médico han sido descritas, de manera sencilla, con estas palabras: “A veces curarás, frecuentemente ayudarás y siempre confortarás.” Nos hemos
especializado en las ciencias y dedicamos poco tiempo al cultivo de las artes, con lo que se pierde sensibilidad social.